Si tienes algún crédito o préstamo con un banco, es probable que te hayas preguntado si, en caso de que lo dejes de pagar, dicha institución se pueda cobrar ‘a lo chino’; es decir, tomar el monto adeudado de tu cuenta de ahorro o de nómina.
Cuando dejas de pagar una deuda bancaria, ya sea porque se te olvidó o por dificultades económicas, debes saber que tu banco no se quedará con los brazos cruzados y llevará a cabo diversas acciones para tratar de recuperar su dinero.
Sin embargo, a continuación, te explicaremos si una de esas acciones significa la retención de tu dinero.
Si obtuviste una tarjeta de crédito o un préstamo con algún banco y, por alguna razón, dejas de pagar tu deuda, la institución pondrá en marcha diversas medidas, como:
El bloqueo de tu crédito para evitar que realices nuevas compras que incrementen la deuda.
El banco comenzará a cobrarte intereses por el retraso en el pago de tu crédito o préstamo, por lo que, aunque ya no puedas comprar nada, tu deuda no dejará de crecer.
Además, el banco reportará tu falta de pago al Buró de Crédito, lo que afectará de manera negativa tu historial y te será difícil acceder a nuevos créditos en el futuro.
De igual manera, la institución recurrirá a su área de cobranza, o bien a un despacho externo, cuyos cobradores comenzarán a llamarte por teléfono, enviarte mensajes y hasta visitarte en tu domicilio para exigirte el pago de la deuda.
Y, como último recurso, si pasan más de 120 días y el banco no ha obtenido el pago de la deuda ni ha visto que tienes voluntad de pago, podrá hacer valer su derecho de recurrir a la vía judicial.
En el caso de los préstamos de nómina, generalmente los contratos estipulan que el pago de los mismos estará domiciliado. Esto quiere decir que, de manera quincenal o mensual, el banco tomará un porcentaje de tu cuenta de ahorro o nómina para cubrir el adeudo.
Por otro lado, en el caso de las tarjetas de crédito u otro tipo de préstamos bancarios, la legislación mexicana establece el derecho de los bancos a solicitar el embargo de la cuenta bancaria del deudor.
Lo anterior consiste en la retención o bloqueo del saldo en la cuenta de alguna persona física o jurídica que posee una deuda que se ha dejado de pagar por determinado tiempo.
Es importante mencionar que los bancos no pueden cobrarse ‘a lo chino’ por alguna deuda que tengas con ellos, pues, para que esto suceda, antes deberá iniciar un proceso legal en tu contra.
Esto significa que, cuando ya tienes un atraso considerable, el banco puede demandarte para que se lleve a cabo un juicio y sea un juez o una entidad autorizada quien ordene el embargo.
Además, tú, como deudor, deberás ser notificado del proceso que se ha iniciado en tu contra, y tendrás 30 días para interponer un juicio de nulidad o para pagar tu deuda.
En caso de que se realice el juicio y éste resulte en favor del banco y se ordene el embargo de tu cuenta, no podrán retener la totalidad de tu dinero, sino solo un porcentaje determinado por el juez.
En México, una de las entidades que puede realizar el cobro de adeudos por medio del embargo de cuentas bancarias es el Servicio de Administración Tributaria (SAT), ya que esta institución tiene la facultad de acceder y consultar las cuentas bancarias de los contribuyentes.
De igual manera, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), podría realizar un embargo de una cuenta bancaria, pero solo para garantizar los créditos adeudados por un patrón, debido a un incumplimiento en sus deberes.
Si así lo deciden, estas instituciones ordenan al banco correspondiente que retenga el saldo del deudor. Entonces, el banco podrá bloquear hasta el 100% del dinero en la cuenta para liquidar el adeudo.
En el caso de las personas jubiladas o pensionadas, es importante que sepas que los bancos no pueden retener dinero de cuentas para pago de pensiones o de ahorro para el retiro.
Si estás pasando por dificultades económicas y se te complica pagar un crédito o préstamos contratado con algún banco, no te asustes, pues esto no significa que van a embargar tu cuenta de nómina.
Sin embargo, sí es importante que busques rápidamente una solución que te permita liquidar tus compromisos y sin endeudarte aún más.
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