¿Te gustaría comenzar a ahorrar, pero crees que tus deudas te lo impiden? Pues, aunque no lo creas, esto no es así.
Por increíble que parezca, y aunque es complicado, sí es posible cumplir con tus obligaciones financieras y ahorrar al mismo tiempo, solo necesitas establecer un presupuesto, planificar muy bien tus gastos, pero sobre todo, tener paciencia y responsabilidad sobre tus finanzas.
A lo largo de nuestra vida, nos vamos poniendo diversas metas financieras, ya sea a corto plazo, como comprar el teléfono móvil más reciente o ir de vacaciones, o a largo plazo, adquirir una casa o un automóvil.
No obstante, para muchos, alcanzar estas metas requiere de tiempo y esfuerzo, especialmente cuando tenemos deudas que pagar. Por ello, es fundamental mantener nuestras finanzas personales sanas; es decir, administrar correctamente nuestro dinero.
Cabe mencionar que las finanzas personales tienen el objetivo de ayudarte a administrar tu dinero de una mejor manera, a fin de que puedas cubrir tus principales gastos y necesidades sin problemas, incluyendo un fondo de ahorro para algún propósito en específico o por si surge algún imprevisto.
Para ello, las finanzas personales contemplan los siguientes elementos:
Ingresos. Es el dinero con el que dispones, como tu salario, bonos o por la renta o venta de algún bien.
Egresos. Se refiere al dinero que pagas por distintos conceptos, como alimentos, el alquiler de la vivienda, servicios como agua, luz y gas, entre otros.
Activos. Son los bienes posees, como casas, terrenos, automóviles, etc.
Pasivos. Son las deudas que tienes con terceros, como bancos, financieras o tiendas departamentales.
De esta manera, mantener unas finanzas personales sanas te puede ayudar a tener estabilidad económica, lo que significa que podrás equilibrar perfectamente tus gastos y tus ahorros.
No. Contrario a lo que se piensa, el endeudamiento no es algo malo, y, de hecho, es hasta necesario, pues muchas veces es la única manera de hacer crecer nuestro patrimonio.
Es decir que, en muchas ocasiones, resulta necesario adquirir créditos o préstamos para hacernos de bienes que no podemos pagar con recursos propios ni al contado, como una casa, un automóvil, o bien para hacer frente a imprevistos como enfermedades o accidentes.
Lo malo viene cuando no administramos correctamente nuestras finanzas y terminamos con una deuda que supera nuestra capacidad de pago, lo que puede dañar severamente nuestra situación económica e historial crediticio.
Si quieres empezar a equilibrar tus ahorros y deudas de una mejor manera, estos consejos pueden ayudarte a lograrlo:
Establece tu presupuesto mensual. Para equilibrar correctamente tu ahorro y el pago de los gastos mensuales, es importante que establezcas un presupuesto que te permita analizar tus ingresos y gastos para definir cuánto puedes ahorrar mes con mes.
No adquieras más deudas. Si lo que quieres es que, a pesar de tener deudas, puedas tener un fondo de ahorro, es fundamental que no adquieras más deudas.
Recorta gastos. También puedes eliminar todos esos gastos hormiga e innecesarios; así como economizar en casa al reducir tu consumo de luz, agua y gas, o bien comprar productos más económicos en el supermercado.
Si tienes varias deudas, enfócate en liquidar una a la vez. Es decir, mientras pagas las mensualidades de todas tus deudas, puedes elegir una, como aquella con los intereses más altos, para liquidarla más rápido.
Procura pagar menos intereses. Ahorrar y pagar las deudas al mismo tiempo es posible si procuras pagar menos intereses. Para ello, es recomendable que pagues tus deudas en el menor tiempo posible, pues, entre más te tardes, más dinero estarás pagando en intereses y te quedará menos para ahorrar.
Consolida tus deudas. Si tienes varias deudas, puedes consolidarlas, es decir, reunificar tus deudas en una sola cuota mensual más baja y con menos interés.
Si quieres salir de deudas para tener un ahorro más grande, existen diversas estrategias que te ayudarán a pagar tus deudas, por ejemplo:
No pagues solamente el mínimo mensual de tus deudas. Si te es posible, paga un poco más mensualmente. Esto te ayudará a evitar el cobro de intereses y a disminuir el tiempo de pago.
Genera ingresos extra. Puedes buscar un mejor empleo o uno adicional al que ya tienes, como cuidar niños, mascotas, o vender productos.
Crea un presupuesto y plan de pago. Esto te será útil para reducir tus gastos tanto como puedas y pagar tu deuda más rápido.
Otra opción para salir de deudas es acercarte a los bancos o entidades financieras, las cuales ofrecen diversas soluciones como préstamos personales, microcréditos, reestructuras o la reunificación de deudas.
Si quieres salir de deudas más fácilmente, siempre puedes recurrir a los expertos.
La mejor opción para recuperar tu tranquilidad financiera es Bravo, la solución para liquidar deudas, en donde encontrarás las mejores oportunidades para sanear tus finanzas.
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Una cuenta a tu nombre donde se depositará tu ahorro, a fin de brindarte seguridad.
Acceso a un crédito para liquidar tus deudas.
Para ello, solo es necesario cumplir con los siguientes requisitos:
Tus deudas deben superar los 50,000 pesos, y debes tener un atraso mínimo de tres meses en los pagos.
Las deudas deben ser negociables.
Debes ser constante en el pago de tu plan de liquidación para aplicar a un crédito que te ayudará a liquidar antes de tiempo.
Mostrar el compromiso para liquidar tus deudas y sanar tus finanzas.
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